- La ciudad de Barcelona hace un esfuerzo por acercar la cultura científica al público de todas las edades de manera lúdica y familiar, inundando la Rambla del Raval con más de 200 actividades
- Investigadores e investigadoras del VHIO, que forma parte del Campus Vall d’Hebron, participaron ayer, como cada año, en este encuentro para todas las edades que reanuda su formato más popular ahora que la situación de la pandemia lo permite
Barcelona, 30 de mayo de 2022.- Este fin de semana del 28 y 29 de mayo, la Rambla del Raval se ha inundado de investigación y conocimiento, que han vuelto a salir a la calle gracias a la 15ª Fiesta de la Ciencia, recuperando su formato más popular y familiar, como en los años anteriores a la pandemia. Este encuentro con la ciencia dirigida a todas las edades que se lleva a cabo cada año en Barcelona recoge más de 200 actividades en 27 espacios diferentes y reúne a más de 150 entidades de la ciudad relacionadas con la ciencia y la divulgación, entre las que se encuentra el Vall d’Hebron Instituto de Oncología (VHIO), que forma parte del Campus Vall d’Hebron.
El encuentro se dirige a un público de todas las edades con un amplio abanico de formatos: experimentos, instalaciones, juegos, talleres, demostraciones, espectáculos, debates, microcharlas, itinerarios y visitas guiadas, entre otros.
Ciencia del Cáncer un domingo por la tarde en el Raval
José Antonio Seoane, investigador principal del Grupo de Biología Computacional del Cáncer del Vall d’Hebron Instituto de Oncología (VHIO), abrió la participación del VHIO en la 15ª Fiesta de la Ciencia a primera hora de la tarde con una microcharla titulada “¿Cómo puede ayudarnos la inteligencia artificial a luchar contra el cáncer?”. Explicó que la inteligencia artificial es una herramienta computacional que está evolucionando y penetrando en muchos campos de nuestra vida cotidiana, poniendo ejemplos como Amazon o Google Maps. Uno de estos campos es la biomedicina, en donde la inteligencia artificial es una herramienta muy potente en la detección del cáncer. Durante la microcharla, el Dr. Seoane fue desgranando cómo se utiliza y cómo se aplica en el diagnóstico del cáncer o en un test genético que permite escoger los fármacos y tratamientos más adecuados para los pacientes. Las preguntas de un público inquieto demostraron que se trata de un tema que nos atrae.
Posteriormente, en el mismo espacio de microcharlas se habló de “Inmunoterapia: el cuarto pilar del tratamiento contra el cáncer”, a cargo de Alena Gros, investigadora principal del Grupo de Inmunoterapia e Inmunología de Tumores del VHIO. La inmunoterapia es un concepto que ha irrumpido en el escenario del tratamiento del cáncer en los últimos años y ya forma parte de los arsenales habituales contra esta enfermedad. Este nuevo enfoque del tratamiento aprovecha las defensas naturales de nuestro cuerpo para atacar a las células cancerosas y combatir esta enfermedad. En los últimos años ha ganado relevancia y se ha convertido en el cuarto pilar de la terapia contra el cáncer, junto a la cirugía, la radioterapia y la quimioterapia. La microcharla nos ayudó a conocer los avances que ha permitido este tratamiento y los retos que le quedan por vencer.
La última actividad del VHIO en la Fiesta fue el taller “¿De qué va esto de las mutaciones?”, un clásico entre los más pequeños que comienza a contar con caras conocidas entre los niños y niñas que ya han participado en otros encuentros como este, en el que VHIO participa habitualmente. Así pues, ayer domingo a la hora de cerrar la fiesta en el espacio “Vida y Salud” las investigadoras del VHIO Carmen Escudero, del Grupo de Investigación Translacional del Cáncer Gastrointestinal no Colorrectal, y Joanna Domènech, del Grupo de Genética del Cáncer Hereditario, impartieron este taller que cuenta, con piezas de LEGO, cómo se produce una mutación. “¿Qué sabemos sobre genética? ¿Y sobre mutaciones? En este taller nos acercaremos de forma práctica a estos conceptos a través de un divertido juego de construcción. Con la formación de una estructura, averiguaremos de forma visual cómo la información del ADN se convierte en quiénes somos y cómo suceden las mutaciones. Cómo se forma la doble hélice de ADN y de ahí el paso al ARN y finalmente a las proteínas”.
Otras Investigadoras del Campus Vall d’Hebron también participaron
La primera actividad en la que participó Vall d’Hebron fue el taller “¿Por qué los plátanos son amarillos?”, el sábado 28 de 15.20 a 16.00 en el espacio “Vida y Salud”. Es una actividad dirigida a niños y niñas de entre 6 y 10 años a cargo de la Dra. Anna Santamaria, codirectora del grupo de Investigación Biomédica en Urología del Vall d’Hebron Instituto de Investigación (VHIR). La Dra. Anna Santamaria explicó a los niños por qué las frutas son como son. La respuesta etás en el ADN, el gran responsable de que los plátanos no sean sandías y que las sandías no sean manzanas. Así, se descubre este misterio a través de la extracción del ADN de un plátano.
A las 18.15 del mismo sábado 28 tuvo lugar la microcharla “Los beneficios del arte en la salud”, a cargo de la Dra. Sara Guila Fidel, psicóloga clínica del Servicio de Salud Mental del Hospital Universitari Vall d’Hebron e investigadora del grupo de investigación en Psiquiatría, Salud Mental y Adicciones del VHIR. El arte ha sido trascendental en la historia de la humanidad, ha marcado nuevas tendencias, ha planteado nuevas formas de percibir el mundo y ha tenido una gran influencia en muchísimos aspectos de la vida y la sociedad. La Dra. Sara Guila Fidel explicó a la audiencia que ahora, gracias a la ciencia, sabemos que además el arte tiene un impacto sobre el bienestar de las personas y que puede contribuir a la prevención y la promoción de la salud. ¿Cómo?
La experiencia compartida entre científicos y familias fue un éxito de participación y muchos de los asistentes a las diferentes actividades manifestaron su interés en este formato de entretenimiento y conocimiento y valoraron muy positivamente las temáticas escogidas. VHIO participa de hace años en todas aquellas actividades divulgativas que sirvan para el fomento de la cultura científica entre chicos y mayores, ya que tiene un enorme convencimiento de que contribuir a familiarizar a la sociedad con la ciencia del cáncer ayuda tanto a desestigmatizar esta enfermedad como a mejorar la base sobre la que se asientan todas las novedades en diagnóstico, prevención, tratamientos y nuevos avances científicos. Solo con conocimiento una sociedad crece libre y preparada para la ciencia del futuro y se familiariza con la investigación, que es la medicina del mañana.
